La educación mediúmnica y la
evangelización del médium
Presentamos en esta edición
el tema
nº
117
del Estudio Sistematizado de
la Doctrina Espirita, que
está siendo presentado aquí
semanalmente, de acuerdo con
el programa elaborado por la
Federación Espirita
Brasileña, estructurado en
seis módulos y 147 temas.
Si el lector utiliza este
programa para el estudio en
grupo, sugerimos que las
cuestiones propuestas sean
debatidas libremente antes
de la lectura del texto que
a ellas sigue.
Si es destinado solamente
para uso por parte del
lector, pedimos que el
interesado intente
inicialmente responder las
cuestiones y solo después
lea el texto referido. Las
respuestas correspondientes
a las cuestiones presentadas
se encuentran al final del
texto abajo.
Cuestiones
para debate
1. ¿Qué factores influencian
la práctica de la
mediumnidad?
2. Hay un hecho
prácticamente general que
ocurre en el proceso de
información e iniciación de
los médiums. ¿Cuál es ese
hecho?
3. ¿Qué es lo que el
instructor Alexandre
recomienda a los médiums que
aspiran al desenvolvimiento
superior y al intercambio
con los sabios
desencarnados?
4. ¿Es cierto decir que la
mediumnidad en sí misma es
neutra?
5. ¿Cuál es, en opinión de
Emmanuel, la primera
necesidad del médium?
Texto para la
lectura
La educación mediúmnica es
fruto de una lenta y
laboriosa iniciación
1. La práctica mediúmnica,
además de subordinada a
leyes que rigen la relación
y el comportamiento de los
seres que habitan este y el
otro mundo, envuelve una
serie de factores inherentes
a la personalidad del
médium, del Espíritu
comunicante y de los demás
participantes de la sesión
mediúmnica.
2. Se hace necesario, por
eso, no sólo comprender el
fenómeno mediúmnico, sino
promover la educación del
aprendiz de la mediumnidad,
el cual, admitido a
construcciones de orden
superior, es invitado al
discernimiento y a la
disciplina, para que se le
aclaren y perfeccionen las
facultades. Para eso, es
indispensable que él se
esclarezca en los principios
saludables y liberadores de
la Doctrina Espírita.
3. Médiums para la
producción de fenómenos
surgen de todas partes y de
todas las posiciones.
Médiums para edificación del
perfeccionamiento y de la
felicidad entre las
criaturas son sólo aquellos
que se hacen auténticos
servidores de la Humanidad.
4. Nada de importante, como
sabemos, se adquiere sin
trabajo. Una lenta y
laboriosa iniciación se
impone a los que buscan los
bienes superiores. Un hecho,
sin embargo, que todos deben
tener presente es que la
formación y el ejercicio de
la mediumnidad encontrarán
siempre dificultades, lo que
no es difícil de entender,
ya que una multitud de
Espíritus poco adelantados
nos cerca, ávidos de
comunicarse con los hombres,
lo que explica la sucesión
de comunicaciones
mediúmnicas sin valor,
triviales y a veces
inconvenientes, que
impacienten y desaniman a
los principiantes.
Mediumnidad no es
disposición de la carne
transitoria, sino expresión
del Espíritu
5. Decepciones y sinsabores
incontables serían evitados
si comprendiéramos que la
mediumnidad trascurre de
fases sucesivas y que, en el
periodo inicial de su
desarrollo, es el médium
envuelto sobre todo por
Espíritus de orden inferior,
cuyos fluidos, aún
impregnados de la materia
terrestre, se adaptan mejor
a los fluidos del medianero
encarnado.
6. Sólo más tarde, cuando la
facultad mediúmnica se
encuentra suficientemente
desarrollada, es que los
Espíritus elevados pueden
intervenir y utilizarla para
un fin más noble.
Obviamente, no se debe
concluir que todos los
médiums, en el inicio de su
trabajo, transmitan
obligatoriamente mensajes de
Espíritus inferiores. Esa
constituye, según León
Denis, la regla, pero
evidentemente existen las
excepciones.
7. El hecho sugiere que,
paralelamente al estudio del
Espiritismo, debe el médium
empeñarse para que ocurra su
reforma moral y se esfuerce
por la vivencia de las
enseñanzas evangélicas. Ese
es el sentido de las
siguientes palabras dichas
por el instructor Alexandre,
conforme podemos leer en el
cap. 9, p. 103, del libro
“Misioneros de la Luz”, de
André Luiz: “Mediumnidad no
es disposición de la carne
transitoria y sí expresión
del Espíritu inmortal”. “Si
aspiráis al desarrollo
superior, abandonad los
planes inferiores. ¡Si
pretendéis el intercambio
con los sabios, creced en el
conocimiento, valorad las
experiencias, intensificad
las luces del razonamiento!
¡Si aguardáis la compañía
sublime de los santos,
santificaos en la lucha de
cada día, porque las
entidades angélicas no se
mantienen aisladas en los
júbilos celestes y trabajan
también por el
perfeccionamiento del mundo,
esperando vuestra angelitud!
¡Si deseáis la presencia de
los buenos, haceos
bondadosos a vuestra vez!”
8. Esclarecen los
instructores espirituales
que la perseverancia en el
compromiso asumido y el
recogimiento íntimo, con
desapego natural de las
pasiones inferiores y de los
artificios secundarios de la
vida social, producen una
liberación de las matrices
de los registros psíquicos,
a los cuales se adaptan las
corrientes mentales de los
Benefactores espirituales,
estableciéndose con eso un
seguro intercambio.
La mediumnidad es cosa santa
y debe ser practicada
santamente
9. Como la mediumnidad en sí
misma es neutra y refleja el
nivel moral de quién la
práctica, es justo concluir
que la actividad mediúmnica
ejercida por el espírita
debe reflejar la moral
espírita. Y siendo la moral
espírita la expresión del
Evangelio, la práctica
mediúmnica espírita debe ser
vivida plena y consciente
con las enseñanzas
cristianas. El candidato al
mediunato espírita debe
tener, por lo tanto, entre
sus primeros deberes, el
estudio del Evangelio a la
luz de la Doctrina Espírita.
10. Advierte Emmanuel, en la
cuestión 387 de su libro “El
Consolador”, que la primera
necesidad del médium es
evangelizar-se a sí aún
antes de entregarse a la
grandes tareas doctrinarias,
porque, si no lo hiciera,
podrá encontrarse con el
fantasma del personalismo en
detrimento de su misión. La
mediumnidad colocada a
servicio de Jesús hace al
medianero dócil y sumiso al
trabajo superior.
11. Quién desee
comunicaciones serias debe,
antes de todo, pedirlas
seriamente y, enseguida,
hacer lo que sea preciso
para granjear la
benevolencia de los buenos
Espíritus, o sea, cultivar
las virtudes que los atraen,
tales como la humildad, la
dedicación, la abnegación y
el más absoluto desinterés
moral y material.
12. El médium necesita
evangelizarse para hacerse
instrumento de mejoría
espiritual que beneficiará
no sólo a sí mismo, sino
también a todos los que se
encuentren a su alrededor.
La mediumnidad – enseña el
Codificador del Espiritismo
– es cosa santa y debe ser
practicada santamente, lo
que significa ejercitarla
con asiduidad, puntualidad y
fidelidad a Jesús y a
Kardec.
Respuestas a las cuestiones propuestas
1. ¿Qué factores influyen la
práctica de la mediumnidad?
R.: Esos factores están
conectados a la personalidad
del médium, del Espíritu
comunicante y de los demás
participantes de la sesión
mediúmnica. He ahí porqué
todo lo que diga respecto al
mundo físico, al mundo
espiritual y al mundo íntimo
de los participantes de una
sesión ejerce influencia en
la actividad mediúmnica.
2. ¿Hay un factor
prácticamente general que
ocurre en el proceso de
formación e iniciación de
los médiums. ¿Cuál es ese
factor?
R.: El hecho que todos deben
tener presente, es que la
formación y el ejercicio de
la mediumnidad encontrarán
siempre dificultades, lo que
no es difícil de entender,
ya que una multitud de
Espíritus poco adelantados
nos cercan, ávidos de
comunicarse con los hombres,
lo que explica la sucesión
de comunicaciones
mediúmnicas sin valor,
triviales y a veces
inconvenientes, que
impacientan y desaniman a
los principiantes.
3. ¿Qué es lo que el
instructor Alexandre
recomienda a los médiums que
aspiran al desarrollo
superior y al intercambio
con los sabios
desencarnados?
R.: La recomendación del
instructor es clara y
objetiva: “Si aspiráis al
desarrollo superior,
abandonad los planes
inferiores. ¡Si pretendéis
el intercambio con los
sabios, creced en el
conocimiento, valorad las
experiencias, intensificad
las luces del razonamiento!
Si aguardáis la compañía
sublime de los santos,
santificaos en la lucha de
cada día, porque las
entidades angélicas no se
mantienen aisladas en los
júbilos celestes y trabajan
también por el
perfeccionamiento del mundo,
esperando vuestra angelitud!
¡Si deseáis la presencia de
los buenos, haceos
bondadosos a vuestra vez!”
4. ¿Es cierto decir que la
mediumnidad en sí misma es
neutra?
R.: Sí.
5. ¿Cuál es en opinión de
Emmanuel, la primera
necesidad del médium?
R.: Dice Emmanuel que la
primera necesidad del médium
es evangelizar-se a sí mismo
antes de entregarse a las
grandes tareas doctrinarias,
porque, si no lo hiciera,
podrá enfrentarse con el
fantasma del personalismo en
detrimento de su misión.
Bibliografia:
O Evangelho segundo o
Espiritismo, de Allan
Kardec, capítulo XXVI, itens
8 a 10.
No Invisível,
de Léon Denis, pp. 60 e 61.
O Consolador,
de Emmanuel, psicografado
por Francisco Cândido
Xavier, questões 387 e 392.
Missionários da Luz,
de André Luiz, psicografado
por Francisco Cândido
Xavier, cap. 9.
Estude e Viva,
de Emmanuel, psicografado
por Francisco Cândido
Xavier, p. 211.
Mediunidade e Evolução,
de Martins Peralva, p. 17.
Terapêutica de Emergência,
por Espíritos diversos,
psicografado por Divaldo P.
Franco, pp. 50 e 51.