La palabra (sustantivo
masculino) ectoplasma
viene del griego:
ektós = fuera
de, exterior +
plasma =
producción; Ocult. Forma
visible con ciertas
propiedades físicas que
sería emitida a veces
por el médium en estado
de trance1.
En cuanto a su
aplicación, viene de la
Metapsíquica y de la
Parapsicología,
relacionándose con
fenómenos de efectos
físicos, comúnmente
llamados
"materialización", con
auxilio de un médium.
Los investigadores2
Ernesto Bozzano
(1862-1943),
investigador italiano,
relata que la sustancia
ectoplásmica ya era bien
conocida por los
alquimistas del siglo
XVII3. Cita
que el polímata (aquel
que estudió o sabe
muchas ciencias)
Emmanuel Swedenborg
(1688-1772), gran
espiritualista del siglo
XVIII, realizó
experimentos con la
sustancia sin emplear el
término ectoplasma
y registró sobre “una
especie de vapor que le
salía de todos los
poros, un vapor de agua
suficiente visible, que
descendía hasta rozar en
la alfombra”.
El ectoplasma, sustancia
aún actualmente casi
desconocida y poco
investigada, tuvo a
finales del Séc. XIX el
periodo de mayores
anotaciones. En aquel
final de siglo,
poderosos médiums de
efectos físicos
asombraron a los hombres
de las Ciencias,
produciendo increíbles
materializaciones.
— En Inglaterra
Tal vez el más famoso de
esos casos haya sido
aquel que fue controlado
por Sir William CROOKS
(1832-1919), químico y
físico inglés, miembro
de la Real Sociedad de
Ciencias de Londres,
siendo investigador de
fenómenos espíritas, se
ocupó también del
ectoplasma, en numerosas
materializaciones del
Espíritu “Katie King”,
con auxilio de la médium
inglesa Florence Cook
(1856-1904).
Crookes realizó sesiones
de materialización en
las cuales se hacía
tangible el Espíritu que
se autodenominó Katie
King, hindú, que afirmó
haber vivido algunos
siglos antes. Las
cartas-artículos de
Crookes fueron
publicadas en Inglaterra
en los periódicos
espiritualistas (p.ej.:
"Quartely Journal of
Science”, de enero de
1874).
En esas memorias Crookes
cita que Katie llegó a
quedar por dos horas
materializada,
conversando con los
presentes, dejándose
tocar. Crookes,
respetuosamente, le
solicitó permiso para
tocarla, habiendo
auscultado su corazón,
que latía a un ritmo más
pequeño del que la
médium Florence Cook,
proveedora del
ectoplasma.
Dispensável registrar
que el emérito
científico se rodeó de
los más rigurosos
cuidados, de forma a
evitar fraude o
mistificación.
Uno de esos cuidados,
prueba definitiva, fue
el hecho de encerrar a
la médium en una sala
anexa y el Espíritu
Katie materializarse en
la otra. Otra prueba,
cabal también, fue el
hecho de Katie haberse
materializado al lado de
la médium, dejando
fotografiarse. Sólo una
prueba más: Crookes
cortó, con permiso de
Katie, un trozo de la
cabellera de ella;
Katie, ella misma, tomó
una tijera y cortó gran
parte de sus cabellos,
pedazos de su vestido y
del velo y los
distribuyó a los
presentes; luego a
continuación, mostró los
agujeros del vestido a
la claridad de la luz y
dio un golpe encima de
la parte cortada, que
instantáneamente se
recompuso.
Aún en Inglaterra, el
físico William Jackson
CRAWFORD (1870-1920),
investigador de las
propiedades del
ectoplasma, realizó
experiencias notables al
respecto. Percibió las
fuertes evidencias de
que el ectoplasma se
origina en los tejidos
físicos, pues estudió a
la médium (Srta.
Goligher): con auxilio
de una balanza,
pesándola antes, durante
y después de la emisión
del ectoplasma.
Verificó disminución del
peso de la persona
después de la emisión y
retorno al peso
original, tras la
reabsorción del
ectoplasma. En una de
las experiencias de
emisión de ectoplasma,
la balanza acusó que la
médium consiguió emitir
23,7 kg4! En
otro tipo de
experiencia, partes
físicas de la Srta.
Goligher quedaban como
que flácidas después de
la emisión,
enriqueciéndose y
volviendo a lo normal,
también al ser
reabsorbida la porción
de ectoplasma emitida.
Utilizándose de un
dinamómetro suspendido
en el techo, conectado a
las piernas de la médium
verificó, repetidas
veces y siempre con los
mismos resultados, que
la tensión en el aparato
disminuía, de 1,8 kg
para 0,45 kg .
— En Francia
Charles Robert RICHET
(1850-1935), científico,
fisiólogo y médico,
Premio Nobel de
Fisiología de 1913,
descubrió y sugirió la
denominación de
ectoplasma, en los
procesos de
materialización.
Aún en Francia, otro
médico, biólogo,
fisiólogo e investigador
- Gustave GELEY
(1865-1924) se asoció a
RICHET en las
investigaciones del
ectoplasma,
consiguiendo, ambos,
probar que el es una
emanación del cuerpo del
médium, en forma de un
plasma lechoso.
— En Alemanía
Albert von
SCHRENK-NOTZING
(1862-1929), médico e
investigador,
dedicándose a la causa
espírita, consiguió la
increíble proeza de, en
sesiones mediúmnicas
experimentales, recoger
porciones de ectoplasma,
por él denominado como
“teleplasma”.
Sometiendo tal material
a examen laboratorio
histológico (estudio de
la formación y
composición de los
tejidos de seres vivos),
en Berlín y Viena,
comprobó su naturaleza
orgánica, es decir,
oriunda de seres
encarnados.
Las investigaciones
De las experiencias
citadas (la mayoría en
el sig. XIX e inicio del
sig. XX) a nuestros
días, en el campo
científico, el
ectoplasma era y aún es
tratado con extrema
reserva. De mi parte no
tengo noticias de nuevas
investigaciones,
actualmente. Eso se
debe, probablemente, al
hecho de que las
“materializaciones”
jamás fueron comprobadas
por la ciencia oficial,
hasta habiendo, al
contrario, un libro
registrando fraudes.
Sea como sea, entiendo
que el fenómeno
espiritual no se
subordina al método
científico, comprobable
en laboratorio, y sí, a
la disposición de
Espíritus que de él
participen, lo que
señaliza que ocurren “in
spiritus” y no “in
vitro”. Y un fuerte
óbice a la comprobación
es el hecho de que las
materializaciones
dependan del ectoplasma,
que sabidamente es
sensible a la luz —
excepto rojo e
infrarrojo —, lo que
impide registros
fotográficos confiables
(con flash).
No obstante,
profesionales de la
Medicina o estudiosos
del Espiritismo que
participaron de algunas
experiencias recientes
con esa sustancia
afirmaron que ella, si
es investigada con rigor
científico,
probablemente abriría
una nueva era en el
tratamiento de casos
considerados de
recuperación imposible.
Es el caso, por ejemplo,
de aplicaciones
espíritas hechas, en la
terapéutica de la
reestructuración de
tejidos vivos afectados
o destruidos por el
cáncer. Informó el
siempre recordado
profesor J. herculano
Pires6
(1914-1979): (...) "Pietro
Ubaldi, aún no siendo
médium ni espírita,
admitía en sus obras que
el ectoplasma podía ser
una nueva manera natural
de reproducción — un
proceso biológico
diferente de los
conocidos, eventualmente
sustituto de la actual
forma de reproducción
sexual".
Registro la opinión de
Ubaldi, demostrando que
no sólo investigadores y
espíritas, sino otras
personas, con la misma
seriedad, un tiempo no
muy distante se ocuparon
del tema ectoplasma.
Características
El ectoplasma, que puede
presentarse en múltiples
aspectos, siendo como ya
cité, normalmente
refractario a la luz
común, soporta luces del
rojo e infrarrojo.
Se desprende con la
emisión y liberación, en
la mayoría de los casos,
por los orificios
naturales del cuerpo del
médium: oídos, nariz,
boca, orificios de la
piel, etc.
Además del médium
principal proveedor del
ectoplasma, otros
médiums presentes en la
experiencia pueden
igualmente proveerlo
para la producción de
materializaciones, pero
siempre en menores
cantidades.
Particularidades
Son varias. Cito algunas:
a. Colores:
pueden variar:
ceniciento, blanco,
amarillo, con manchas o
negro;
b. Estados:
tangible, amorfo,
acuoso, sólido; al
inicio es difuso,
nebuloso, cual tenue
humo blanco, pasando, a
veces, a la consistencia
semilíquida o masa.
c. Al tacto:
puede impresionar desde
la sensación de tela de
araña hasta la forma
sólida de un objeto;
d. Comando: la
característica
fundamental del
ectoplasma es que ele s
dócil al comando mental
del médium, más allá de
los Espíritus y personas
presentes en la reunión
donde se da su
producción;
e. Producción y
reversión: todos
pueden producir
ectoplasma. Pero,
personas hay que lo
hacen en abundancia,
siendo llamadas “médiums
de efectos físicos".
Revierte al origen
(cuerpo del médium que
lo produjo), con la
misma facilidad con que
fue emitido.
El Ectoplasma y el
Espiritismo
El Espiritismo se ocupo
del ectoplasma:
- Allan Kardec,
refiriéndose en
particular a las
apariciones tangibles,
en “El Libro de los
Médiums”, Cap. VI, nº
104, esclarece que:
El Espíritu que quiere o
puede hacerse visible,
reviste a veces una
forma aún más precisa,
con todas las
apariencias de un cuerpo
sólido. (...) En algunos
casos, finalmente, y
bajo el imperio de
ciertas circunstancias,
la tangibilidad se puede
hacer real, es decir,
posible se hace al
observador tocar,
palpar, sentir, en la
aparición, la misma
resistencia, el mismo
calor que en un cuerpo
vivo. (...) Los hechos
de apariciones tangibles
son los más raros; sin
embargo, los que se han
dado estos últimos
tiempos, por la
influencia de algunos
médiums de gran poder y
absolutamente
autentificados por
testimonios
irrecusables.
(Continúa en la próxima
edición.)
In Grande
Enciclopédia
Larousse
Cultural, Volume
4. p. 1114,
1990,
Ed.Universo
Ltda., SP/SP
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