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Estudio de las Obras de Allan Kardec Português   Inglês

Año 10 - N° 460 - 10 de Abril de 2016

ASTOLFO O. DE OLIVEIRA FILHO                    
aoofilho@gmail.com
                                      
Londrina,
Paraná (Brasil)  
 
Traducción
Maria Reyna - mreyna.morante@gmail.com
 

 
 

Obras Póstumas

Allan Kardec

(Parte 6)

Continuamos en esta edición el estudio del libro Obras Póstumas, publicado después de la desencarnación de Allan Kardec, pero compuesto con textos de su autoría. El presente estudio se basa en la traducción hecha por el Dr. Guillon Ribeiro, publicada por la editorial de la Federación Espírita Brasileña.

Preguntas para debatir

51. ¿Las apariciones tangibles son frecuentes?

52. ¿En qué consiste la transfiguración?

53. Durante el sueño, ¿el alma duerme junto al cuerpo físico?

54. Cuando el Espíritu se aleja del cuerpo, ¿cómo se produce la comunicación entre ellos? 

55. ¿En qué circunstancias se comprueban de manera evidente la independencia y la emancipación del alma?

56. Cuando el alma se emancipa y actúa a distancia, ¿el desprendimiento produce la inercia del cuerpo?

57. ¿El éxtasis es el grado máximo de emancipación del alma?

58. ¿Hay personas en las que el desprendimiento del alma se produce con dificultad?

59. ¿Puede el Espíritu de un encarnado aparecerse a otras personas?

Respuestas a las preguntas propuestas

51. ¿Las apariciones tangibles son frecuentes?

No; son muy raras, pero las apariciones vaporosas son frecuentes, sobre todo en el momento de la muerte. Parece como si el Espíritu desprendido desease apresurarse para volver a ver a sus parientes y amigos, como para avisarles que acaba de dejar la Tierra, y decirles que continúa vivo. (Obras Póstumas, Manifestaciones visuales.)

52. ¿En qué consiste la transfiguración?

El periespíritu de los encarnados goza de las mismas propiedades que el de los Espíritus. Como ya se ha dicho, de ningún modo queda confinado en el cuerpo sino que irradia y forma a su alrededor una especie de atmósfera fluídica; ahora bien, puede ocurrir que, en ciertos casos y bajo el imperio de las mismas circunstancias, sufra una transformación. La forma real y material del cuerpo puede desaparecer bajo esa capa fluídica, si así se puede expresar, y adoptar momentáneamente una apariencia por completo diferente, incluso la de otra persona o la del Espíritu que combine su fluido con el del individuo, o incluso dar a un rostro feo un aspecto bello y radiante. Ese es el fenómeno que se designa con el nombre de transfiguración, fenómeno bastante frecuente, que se produce principalmente cuando las circunstancias provocan una expansión más abundante de fluidos. El fenómeno de la transfiguración se puede manifestar con una intensidad muy diferente, según el grado de purificación del periespíritu, grado que corresponde siempre al de la elevación moral del Espíritu. Se limita a veces a un simple cambio del aspecto de la fisonomía, como puede dar al Espíritu una apariencia luminosa y espléndida. (Obras Póstumas, Transfiguración.)

53. Durante el sueño, ¿el alma duerme junto al cuerpo físico?

No. Sólo el cuerpo reposa durante el dormir, pues el Espíritu no duerme; aprovecha el reposo del cuerpo y los momentos en que su presencia no es necesaria, para actuar separadamente e ir adonde quiera. Goza, entonces, de su libertad y de la plenitud de sus facultades. (Obras Póstumas, Emancipación del alma.)

54. Cuando el Espíritu se aleja del cuerpo, ¿cómo se produce la comunicación entre ellos? 

Durante la vida, el Espíritu nunca está completamente separado del cuerpo; a cualquier distancia a la que se transporte, siempre está unido a él por un lazo fluídico que sirve para llamarlo cuando su presencia es necesaria; ese lazo sólo se rompe con la muerte. (Obras Póstumas, Emancipación del alma.)

55. ¿En qué circunstancias se comprueban de manera evidente la independencia y la emancipación del alma?

Eso sucede, sobre todo, en el fenómeno del sonambulismo natural y magnético, en la catalepsia y en la letargia. La lucidez sonambúlica no es más que la facultad que tiene el alma de ver y sentir sin la ayuda de los órganos materiales. Esa facultad es uno de sus atributos y reside en todo su ser; los órganos del cuerpo son los canales estrechos por donde le llegan ciertas percepciones. La visión a distancia que poseen algunos sonámbulos, proviene del desplazamiento del alma, que ve lo que sucede en los lugares adonde se transporta. En sus peregrinaciones, está siempre revestida de su periespíritu, agente de sus sensaciones, pero nunca está completamente separada del cuerpo, como ya se ha dicho. (Obras Póstumas, Emancipación del alma.)

56. Cuando el alma se emancipa y actúa a distancia, ¿el desprendimiento produce la inercia del cuerpo?

Sí; algunas veces el cuerpo parece privado de vida y no goza por completo de su actividad normal; hay siempre una cierta absorción, un desprendimiento más o menos completo de las cosas terrenales; el cuerpo no duerme, camina, obra, pero los ojos miran sin ver; se comprende que el alma está en otro lugar. Como en el sonambulismo, el alma ve las cosas ausentes; tiene percepciones y sensaciones que nos son desconocidas; a veces, tiene la presciencia de algunos conocimientos futuros por la relación que reconoce entre estos y las cosas presentes. Penetrando en el mundo invisible, ve a los Espíritus con los cuales puede conversar y cuyos pensamientos nos puede transmitir. La emancipación del alma, a veces, atenúa las sensaciones físicas al punto de producir una verdadera falta de sensibilidad que, en los momentos de exaltación, le permiten soportar con indiferencia los dolores más vivos. Esa falta de sensibilidad proviene del desprendimiento del periespíritu, agente de transmisión de las sensaciones corporales, porque el Espíritu ausente no siente las heridas del cuerpo. (Obras Póstumas, Emancipación del alma.)

57. ¿El éxtasis es el grado máximo de emancipación del alma?

Sí. Si en el sueño y en el sonambulismo el alma deambula por los mundos terrenales, en el éxtasis penetra en un mundo desconocido, en el de los Espíritus etéreos con los cuales entra en comunicación, sin todavía traspasar ciertos límites, que no podría trasponer sin romper totalmente los lazos que la atan al cuerpo. En el éxtasis, el aniquilamiento del cuerpo es casi completo; sólo tiene, por así decirlo, la vida orgánica, y se siente que el alma está unida a ella sólo por un hilo que un esfuerzo más fuerte cortaría para siempre. (Obras Póstumas, Emancipación del alma.)

58. ¿Hay personas en las que el desprendimiento del alma se produce con dificultad?

Sí. Existen personas cuyo periespíritu está de tal manera identificado con el cuerpo, que el desprendimiento del alma se produce con extrema dificultad, incluso en el momento de la muerte; por lo general, son las que vivieron más materialmente; son también aquellas cuya muerte es más penosa, más llena de angustias y la agonía más larga y dolorosa; pero hay otras, por el contrario, cuya alma está prendida al cuerpo por lazos tan débiles, que la separación se produce sin estremecimientos, con la mayor facilidad y, frecuentemente, antes de la muerte del cuerpo. Ante la aproximación del fin de la vida, el alma ya vislumbra el mundo donde va a entrar, y ansía el momento de su completa liberación. (Obras Póstumas, Emancipación del alma.)

59. ¿Puede el Espíritu de un encarnado aparecerse a otras personas?

Sí. La facultad que tiene el alma de emanciparse y desprenderse del cuerpo durante la vida puede dar lugar a fenómenos análogos a los que producen los Espíritus desencarnados. Mientras el cuerpo duerme, el Espíritu, se transporta a diversos lugares, se puede volver visible y aparecerse bajo una forma vaporosa, ya sea en sueños o en estado de vigilia; y puede, igualmente, presentarse bajo una forma tangible, o por lo menos con una apariencia tan identificada con la realidad, que varias personas pueden estar en lo cierto cuando afirman haberlo visto, en el mismo momento, en dos puntos diferentes. El fenómeno es muy raro y fue el que dio origen a la creencia en los hombres dobles. A esto se le dio el nombre de bicorporeidad. (Obras Póstumas, Apariciones de vivos y bicorporeidad.) 

 

 


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