Francisco Rebouças:
“Necesitamos ver
las casas espíritas
repletas de niños,
aprendiendo la moral
y la ética enseñada
por la Doctrina de
los Espíritus”
La Casa espírita
debe tener por meta
la evangelización de
aquellos que años
más tarde estarán
con la
responsabilidad de
llevar adelante el
verdadero mensaje
espírita y la
transformación
para lo mejor de
nuestra sociedad
Nacido en San Luís
do Maranhâo, José
Francisco Costa
Rebouças reside
actualmente en
Niterio (RJ), donde
es responsable por
el Centro de Interés
de la Mediumnidad,
del Plantâo Pro-Casa
Espírita, que
procura reciclar
materias y preparar
a trabajadores para
actúar con
desenvoltura y
conocimiento en las
diversas actividades
de las Casas
espíritas en aquella
ciudad. La familia
de Rebouçâo se mudó
para Rio de Janeiro,
cuando él aun era
niño en busca de
mejores
oportunidades de
trabajo.
Pos-graduado en
Recursos Humanos, el
articulista y
colaborardor de
nuestra revista,
habla sobre diversos
asuntos en la
entrevista que nos
fue concedida, como
el
|
|
lector verá
enseguida.
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El Consolador: ¿Qué
cargos o funciones
ya ejerció usted en
el movimiento
espírita?
Formé parte del
equipo encargado en
el área de la
mediumnidad de la
extinguida USEERJ(Unión
de las Sociedades
Espíritas del Estado
de Rio de Janeiro),
hoy CEERJ (Consejo
Espírita del Estado
de Rio de Janeiro),
comandada en esa
época por Miguel
Tavares de Gouveia,
en la cual participé
de varios seminarios
realizados por todo
el estado de Rio de
Janeiro, sobre el
referido tema. Fui
miembro del CEUNIT (Consejo
Espírita de
Unificación de
Niteroi), de donde
me retiré por
absoluta falta de
tiempo para
comparecer con
frecuencia a las
reuniones. Como no
me gusta no cumplir
con mis compromisos,
entonces preferí
apartarme.
El Consolador: ¿Qué
cargo ejerce usted
en este momento?
Soy responsable por
el Centro de Interés
de la Mediumnidad,
do Plantâo Pró-Casa
Espírita, evento
oficial del Consejo
Espírita de
Unificación de
Niterio (CEUNIT). La
Plantación procura
reciclar materias y
preparar
trabajadores para
actuar con
desenvoltura y
conocimiento en las
diversas actividades
de las casas
espíritas en nuestra
ciudad. Soy
presidente del
Consejo Fiscal de la
UMEN – Unión de la
Juventud Espírita de
Niteroi y también
formo parte de la
coordinación de los
grupos de estudio en
nuestra casa.
Participo como
articulista de
diversos órganos de
divulgación de la
doctrina espírita
por todo el Brasil,
sites, periódicos,
revistas, además de
realizar
conferencias por
todo el estado.
El Consolador: ¿Cuándo
tuvo usted contacto
con el Espiritismo?
Fui criado en una
familia católica, y
tomé conocimiento de
la Doctrina Espírita
por medio de mi
novia, hoy mí esposa
Heloisa, que ya era
espírita 35 años
atrás.
El Consolador: ¿Cuál
fue la reacción de
su familia ante su
adhesión a la
Doctrina Espírita?
Inicialmente no les
gustó la idea, pues
como yo, no tenían
conocimiento de lo
que era ser
verdaderamente
espírita. Hoy, ya
cambiaron de opinión
y, aunque continúen
en su mayoría
católicos, respetan
mi opción de seguir
la Doctrina de los
Espíritus.
El Consolador: De
los tres aspectos
del Espíritismo –
Científico,
Filosófico y
Religioso - ¿cuál es
el que más lo atre?
Los tres, pues no
consigo ver uno más
importante que el
otro.
El Consolador: ¿Qué
autores espíritas
más le agradan?
Son muchos. Entre
ellos, Kardec, André
Luiz, Emmanuel,
Joanna de Ângelis,
Vianna de Carvalho,
Manoel Philomeno de
Miranda, Richard
Simonetti, Yvonne do
Amaral Pereira,
Bezerra de Menzes,
Camilo, entre otros.
El Consolador: ¿Qué
libros espíritas
considera usted de
lectura
indispensable a los
compañeros
principiantes?
La codificación
kardecista
incluyendo la
Revista Espírita,
las obras de
Francisco Cándido
Xavier,
particularmente
aquellas escritas
por Emmanuel y André
Luiz.
El Consolador: Si
usted fuese a pasar
algunos años en un
lugar remoto, con
acceso restringido a
las actividades y
trabajo espíritas, ¿qué
libros
pertenecientes a la
Doctrina Espírita
llevaría?
Los que cite
anteriormente y aun
las obras de Joanna
de Ângelis, Yvonne
A. Pereira, Bezerra
de Menezes, León
Denis, que no
podrían faltar.
El Consolador: las
divergencias
doctrinarias en
nuestro medio se
reducen a pocos
asuntos. Uno de
ellos dice sobre el
llamado Espiritismo
laico. ¿Para usted
el Espíritismo es
una religión?
Jamás tuve ninguna
duda a ese respecto.
Sobre el asunto hice
un artículo en que
coloco los
argumentos
encontrados en la
codificación, para
aclarar ese asunto,
del cual retiro el
siguiente trecho:
los Espíritus
proclaman a un Dios
único, soberanamente
justo y bueno; ellos
dicen que el hombre
es libre y
responsable por sus
actos, recompensado
o castigado por el
bien o por el mal
que hubiese hecho;
ponen por encima de
todas las virtudes,
la caridad
evangélica y la
siguiente regla
sublime enseñada por
el Cristo: hacer a
los otros como
queremos que nos sea
hecho. ¿No son estos
los fundamentos de
la religión? (...)
Quien se interesa
por leer el artículo
podrá encontrarlo en
mí nombre, en la
sección artículos en
la dirección que
sigue:
http://www.evangelho.espiritismo.nom.br.
Eso no es ninguna
propaganda del site,
no tengo esta
intención.
El Consolador: Otro
tema que suscita
generalmente debates
acalorados, es
respecto a la obra
publicada en Francia
por J.B. Roustaing.
¿Cuál es su
apreciación de esa
obra?
Soy espírita
convencido y hago
mias las palabras de
Kardec sobre el
asunto: “Conviene
pues, considerar
esas explicaciones
como opiniones
personales de los
Espíritus que las
formularon,
opiniones que pueden
ser justas o falsas,
y que, en todos los
casos, tiene
necesidad de la
sanción del control
universal, y hasta
más amplia
confirmación no
podrían ser
consideradas como
partes integrantes
de la Doctrina
Espírita” – palabras
del codificador en
la revista Espírita
de 1866,
reportándose a los
“Evangelios
explicados” por el
Sr. Roustaing. De
esa forma, en mí
opinión, el
roustainguismo no es
ni nunca será
Espiritismo.
El Consolador: El
tercer asunto en que
la práctica espírita
a veces diverge está
relacionado con los
llamados pases
patronizados,
propuestos en la
obra de Edgar
Armond. En Paraná la
opción ya definida
por la Federación es
tan solamente la
imposición de las
manos, tal como
recomienda José
Herculano Pires. ¿Qué
piensa usted al
respecto de eso?
Respeto las
opiniones de los que
no tienen el mismo
entendimiento mío
sobre cualquier
asunto del
Espiritismo, pero no
puedo estar de
acuerdo con algo que
mi exigente razón no
acepta, y ese es uno
de los asuntos, que
paso a explicar el
porqué. En materia
de asuntos que
levantan polémicas,
procuro investigar a
fondo en las obras
de la codificación y
en las otras de
reconocido contenido
doctrinario los
fundamentos para
colocarme a favor de
esta o aquella
teoría y, en el
asunto en epígrafe,
traigo algunos
pasajes que
consolidan mí
posición en relación
al tema que es
extenso y pide
mejores reflexiones
y profundos estudios:
1) “El Coronel
Sobreira, inspirado
por el Mentor, se
acercó al médium y
acudió Matías
incorporado con el
recurso de la
aplicación de pases
magnéticos de largo
curso con la función
calmante...” Libro:
Cadenas Rotas, Cap.
19, Divaldo P.
Franco, por el
Espíritu Manoel
Philomeno de
Miranda. Librería
Alvorada Editora 11ª
edición.
2) “Conrado,
imponiéndo la
diestra sobre la
frente de la médium,
le comunicó una
radiante corriente
de fuerzas y la
inspiró a mover las
manos sobre el
enfermo, desde la
cabeza hasta el
hígado enfermo.
Notamos que el
córtex encefálico se
revistió de una
sustancia luminosa
que, descendiendo en
hilos tenuísimos,
alcanzó el campo
visceral. La señora
exhibió una
inequívoca expresión
de alivio, en la
expresión
fisionómica,
retirándose
visiblemente
satisfecha, después
de prometer que
volvería al
tratamiento.” Libro:
En los Dominios de
la Merdiumnidad –FEB
23ª, edición, Cap.
17- Página 169.
Chico Xavier por el
Espíritu André Luiz.
3) “La voluntad de
aliviar, de curar –
dijésemos – comunica
al fluido magnético
propiedades
curativas. El
remedio para
nuestros males está
en nosotros. Un
hombre bueno y sano
puede actuar sobre
los seres débiles y
enfermizos,
regenerarlos por
medio del soplo, por
la imposición de las
manos e incluso
mediante objetos
impregnados de su
energía. Se opera
más frecuentemente
por medio de gestos,
denominados pases,
rápidos o lentos,
que se quiera
producir en los
enfermos. Ese
tratamiento debe ser
seguido con
regularidad, y las
sesiones renovadas
todos los días hasta
la cura completa.”
Libro: En lo
Invisible, León
Denis – Cap. XV.
Existen otros textos
en otras obras que
aquí no cito en el
momento para no
extenderme más sobre
el asunto, pero que
nos aclaran mucho
sobre el
procedimiento del
pase. Si en
mediumnidad la
concentración y la
sintonía son
factores
indispensables para
que nosotros los
médiums podamos
registrar las
inpiraciones que los
Buenos Espíritus nos
transmiten ¿cómo no
considerar esas
instrucciones que
recibimos en la hora
de la aplicación de
los pases? No quiero
aquí dar la
impresión de saber
más que nadie, sólo
registrar el porqué
de no estar de
acuerdo con esa
práctica que se
arrastra en el
movimiento espírita,
y puedo incluso
afirmar que, después
de una exhaustiva
investigación sobre
el tema, no encontré
en la codificación o
en las obras
complementarias de
la Espiritualidad
ningún mensaje que
abone ese
procedimiento.
El Consolador: ¿Cómo
ve usted la
discusión en torno
del aborto? En su
modo de ver las
cosas, los espíritas
deberían ser más
osados en la defensa
de la vida como ha
hecho la Iglesia?
Los Espíritus
Superiores nos
afirman: “Son
llegados los tiempos
en que las
enseñanzas del
Cristo han de ser
completados; en que
el velo
intencionadamente
lanzado sobre
algunas partes de
esa enseñanza ha de
ser levantado, en
que la Ciencia,
dejando de ser
exclusivamente
materialista, tiene
que tener en cuenta
el elemento
espiritual y en que
la Religión, dejando
de ignorar las leyes
orgánicas e
inmutables de la
materia, como dos
fuerzas que son,
apoyándose una en la
otra y marchando
combinadas, se
prestarán mutuo
concurso. Entonces,
no desmentida más
por la Ciencia, la
Religión adquirirá
un inmenso poder,
porque estará de
acuerdo con la razón,
ya no pudiendo
oponer más la
irresistible lógica
de los hechos.” (ESE
– Cap. 1, ITEM 8.)
Pienso que el
Espiritismo, con
tantos conocimientos
de la vida
espiritual, mucha
más responsabilidad
tiene de luchar con
todos los recursos
disponibles para la
victoria de la vida
frente a la
ignorancia y a la
mente. De esa forma
soy favorable a un
encajamiento serio
de todos los
espíritas en la
lucha contra la
aprobación de esa
aberración que
representa esa Ley
indencente y
criminal,
participando
activamente en todos
los sectores de la
sociedad en que
actuamos, haciendo
la parte que nos
compete hacer, para
que tengamos la
conciencia tranquila
incluso que ese
absurdo venga a ser
legalizado,
contrariando
nuestros principios
cristianos.
El Consolador: La
eutanasia, como
sabemos, es una
práctica que no
tiene el apoyo de la
Doctrina Espírita.
Kardec y otros
autores, como Joanna
de Ângelis, ya se
pisicionaron sobre
ese tema. Surgió, no
obstante,
ultimamente la idea
de la ortotanasia,
defendida hasta
incluso por médicos
espíritas. ¿Cuál es
su opinión al
respecto?
A pesar de ser nuevo,
ya lei bastante
sobre el asunto,
pero no me convencí
con sus argumentos;
por esa razón,
continuo contra
cualquier iniciativa
de abreviar la vida
de quien quiera que
sea. Si no somos
dueños siquiera de
nuestros destinos, ¿cómo
decidir el destino
del prójimo?
El Consolador: ¿El
movimiento espírita
en nuestro país le
agrada o falta algo
en el que favorezca
una mejor
divulgación de la
Doctrina?
Esta pregunta vino a
ser oportuna. Pienso
que el movimiento
espírita aun es
bastante egoísta en
esa y en muchas
otras cuestiones.
Basta para eso que
se intente divulgar
un trabajo, una
noticia etc. Si
usted no es figura
conocida
nacionalmente en el
medio espírita,
probablemente
desistirá, pues por
más que haga, no
encontrará eco en su
solicitud, salvo
honrosas
excepciones. No
obstante muchas
discusiones sin
fundamento, que
perjudican
sobremanera el
movimiento espírita,
tiene espacio
garantizado en los
medios de
divulgación del
Espiritismo. Pienso
que necesitamos
darnos la mano,
ayudándonos
mutuamente, teniendo
como lema: “Fuera de
la caridad no hay
salvación”.
El Consolador: ¿Cómo
ve usted el nivel de
la criminalidad y de
la violencia que
parece aumentar en
todo el país y como
nosotros, espíritas,
podemos cooperar
para que esa
situación sea
redundada?
Estamos viviendo la
transformación que
los Espíritus nos
pregonan en la obra
de la codificación,
y sabemos que es
pasajero este estado
de cosas y que todo
va a cambiar para
mejor. Fue Jesús
quien nos aseveró
que: “...los mansos
heredarán la Tierra”.
Nos resta trabajar
para hacer cómo
merecer ser uno de
los herederos para
comprobar y vivir
las alegrías de los
nuevos tiempos que
están en camino.
El Consolador: La
preparación del
advenimiento del
mundo de
regeneración en
nuestro planeta ya
dio, como sabemos,
sus primeros pasos.
¿De aquí a cuantos
años cree usted que
la Tierra dejará de
ser un mundo de
pruebas y
expiaciones, pasando
plenamente a la
condición de un
mundo de
regeneración, en
que, según San
Agustín, la palabra
amor estará escrita
en todas las frentes
y una equidad
perfecta regulará
las relaciones
sociales?
Sería mucha audacia
mía establecer una
fecha para ese
acontecimiento,
incluso porque todo
dependerá de la
buena voluntad de
los hombres en
concurrir para ese
advenimiento.
Confirmo, como
espírita que soy,
que no tengo la
menos duda que ese
tiempo llegara, y
ruego al Padre que
nos auxilie mucho
para que sea lo más
brave posible.
El Consolador: En
base de los
problemas que la
sociedad terrena
está enfrentando, ¿cuál
debe ser la
prioridad máxima de
los que dirigen
actualmente el
movimiento espírita
en Brasil y en el
mundo?
Dar total atención
al trabajo de
evangelizaciones de
los niños en
nuestras
instituciones
espíritas.
Necesitamos atender
al apelo de Jesús
cuando nos dice:
“Dejad que vengan a
mí los niños”. (ESE
– Cap. 8, Ítem 18.)
La Casa espírita
debe tener por meta,
entre otras cosas
tantas cosas
igualmente
importantes, el
cuidado en la
evangelización de
aquellos que años
más tarde estarán
con la
responsabilidad de
llevar adelante el
verdadero mensaje
espírita y la
transformación para
mejor de toda una
sociedad. Es desde
pequeñitos que se
forman los hombres.
Necesitamos, pues,
ver las casas
espíritas repeltas
de niños,
aprendiendo desde
pronto la moral y la
ética enseñada por
la Doctrina de los
Espíritus,
contribuyendo de esa
forma para una
sociedad más
consciente y
responsable en todos
los segmentos de
nuestra sociedad.
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